lunes, 27 de febrero de 2012

Por qué en Asturias? Para nosotros

Varios son los viajes que hemos hecho juntos a Asturias. El primero, si no me equivoco, se fraguó antes de un concierto de El Canto Del Loco. Mr. Argu y yo nos estábamos dando una "tregua" de esas en las que decíamos que teníamos que ser sólo amigos y estábamos todos tomando algo en un bar cercano a la Plaza de las Ventas. El caso es que las cervezas como siempre ayudan a tomar decisiones, y nos pareció genial ir el siguiente fin de semana a Asturias, a casa de mi abuelo, que por aquel entonces vivía ya con mi tía, con lo que la casa era para nosotros.
Y allá que fuimos: una pareja, un amigo que estrenaba soltería y andaba algo depre, Mr. Argu y yo.
Lo que empezó como un viaje lleno de dudas para mí, acabó siendo el momento en el que Mr. Argu aclaró todas las suyas, y el comienzo de nuestra verdadera historia como pareja.
A partir de entonces hemos ido muchas veces más, en Semana Santa pasando un frío pelón y viendo los lagos de Covadonga nevados (inolvidable aquellos momentos: cuando la zapatilla se me quedó en la nieve y se llenó del barro que había debajo, cuando por el disgusto de la zapatilla iba cabizbaja y me choqué contra un poste... en fin, ese no fue mi viaje :-S
En verano, disfrutando de la playa de Vega, de baños en el río, de paseos con los perros, de tardes de "sidreo", de aquella vez que me cayó un ratón del techo, de las fiestas "de prao"...
Y el día de nuestra boda pasará a ser otro recuerdo más con Asturias de fondo, y vaya fondo!

Por qué en Asturias? Para mí

Yo sin embargo iba a Asturias sobre todo en Semana Santa o Navidades, más bien en la parte occidental, y acompañada de mi padre, que según se montaba en el coche destino Asturias comenzaba a tener acento. Siempre nos hemos partido de risa con este detalle, y ahora somos Mr. Argu y yo los que imitamos el acento que tenemos tan oído, y nos partimos de risa.
También fuimos algún verano, pero como mi padre tenía ese detalle tan suyo de decirnos que allí no había playa pues... como que no parecía verano.
Para mí Asturias significa una cosa principalmente: mis abuelos. Íbamos a su casa, que ahora tiene en frente una autopista, pero que en su día contaba con un estupendo prado en el que pastaban las vacas, que nos despertaban con sus mugidos que mi hermana y yo tratábamos de imitar, a veces incluso obteniendo respuesta.
Recuerdo sobre todo las cenas de Navidad, en las que mis primos y mi hermano se peleaban por los langostinos más gordos, en las que mi tía y mi abuela se pasaban el día metidas en la cocina, y aquella Nochevieja en la que mi abuelo, que siempre se iba a la cama antes de las 10, se quedó boquiabierto viendo la teta de Sabrina. Todos sabemos que aquello NO fue un accidente...
Posteriormente, gracias a mi hermano Asturias significa verle a él y sus enanos y de esa manera sigo queriendo ir a Avilés sin que me inunde una melancolía enorme.
Ojalá existiera un reproductor tipo DVD que enchufarte en la cabeza y poder ver en la tele esas escenas que marcaron tu vida. Al menos, siempre nos quedará Youtube, donde si queréis, al menos podéis ver la teta de Sabrina.

Cómo se declaró Mr. Argu

El día de nuestra boda haremos 6 años juntos. Y justo un año antes fue cuando Mr. Argu me pidió que me casara con él. Como era nuestro aniversario, reservó por sorpresa una habitación en un hotelito rural que tenía unas impresionantes vistas de la ría de Villaviciosa, el Mirador de Moriyón. Os lo recomiendo. El trato es super familiar, el desayuno es completísimo, y tienen una parrilla para hacer barbacoa, que ellos mismos te preparan. Tu llevas la carne y ellos se encargan de las brasas, que es lo que más guerra da siempre.

No me digáis que las vistas no son espectaculares... Lamentablemente Villaviciosa no tiene gran cosa que ver, así que decidimos ir a cenar a Gijón, que es una ciudad que a mí siempre me ha encantado y en la que me encuentro muy cómoda. Cenamos en El Lavaderu. Mmmm! Inolvidables aquellas zamburiñas, y deseandito que estoy de volver sólo para volver a catarlas. El sitio no es especialmente glamuroso, pero se come taaaan bien, que hasta hablar con la boca llena puede ser romántico.
Mientras estábamos cenando, vino un vendedor de lotería, y para engatusarnos y que le comprásemos nos dijo: "venga, para la boda!". Claro, yo no sabía que justo me lo iba a pedir después, pero cuando luego lo hablamos nos reímos mucho.
Después, paseando por el Paseo de la Playa de San Lorenzo fue cuando Mr. Argu se decidió. No hubo rodilla hincada en el suelo, pero ni falta que hizo, además, antes de ver el anillo yo ya estaba llorando de la emoción, así que... y el resto pues ya casi lo sabéis todo, porque... os lo estoy contando yo!!!

Y cuando acabe nuestra boda, qué?

Me está gustando tanto esto de organizar todos los detalles de la boda que cuando acabe me temo que me voy a quedar tan desinflada que voy a tener que encontrarle algún sentido nuevo a mi vida.
Veo diariamente en los blogs a gente que se dedica profesionalmente a organizar bodas y todo tipo de eventos y me hace añorar mi pasado como organizadora de congresos y eventos, y ahora que ya he probado esto de organizar bodas... me he enganchado. Quiero máaaas!!!

Que tengáis un buen fin de semana!

La celebración dónde, por favor?

Cuando le dijimos a algunas personas que nos casábamos en Cangas de Onís, la siguiente pregunta era ¿en el Parador? ... pues no. El entorno del parador es ideal, la verdad, a la orilla del Sella, rodeado de vegetación... pero desechamos la idea por 2 motivos:
- Porque los menús nos parecían un poco caretes (precio nivel Parador, claro)
- Porque la gente de allí recomienda otros sitios por relación calidad-precio
Y cuando una de los que te lo recomienda es una maravillosa cocinera pues... te hace pensártelo, claro.
Un día, paseando por Cangas me fijé en una finca que hay en pleno centro. Tenía una pinta estupenda, con sus jardines, su hórreo... y preguntamos. Efectivamente celebraban bodas, y nos atendió una chica encantadora. Luego nos informamos con la gente de la zona y nos dijeron que era un sitio donde se comía estupendamente. Así que cuando ya sabíamos que nos casábamos, teníamos la fecha, etc. en seguida hicimos la reserva en firme. Os dejo alguna foto para que la veáis. A mí me parece un sitio muy pintón, la verdad. No será el Parador, pero también está junto a un río, y prefiero un hórreo a una capilla.

Por qué en Asturias? Para Mr. Argu

Muchos de vosotros sabréis de nuestra fascinación por Asturias, otros no tanto.
La familia Argu y la familia Gonfu son ambas de origen asturiano. Supongo que a mi familia también le entusiasma que Mr. Argu sea de allá, aunque la verdad es que no lo comentan, pero los que desde luego parecen encantados con la idea son la familia de Mr. Argu. Y cuando dijimos que nuestra boda sería en Asturias, se quedaron emocionados con la idea
Eso siempre lo tuvimos claro. Tenía que ser allí.
Aunque nuestras visiones son bien distintas:
Mr. Argu iba allí a pasar todo el verano con sus abuelos, en una zona más oriental de Asturias. llegaba en junio, recién acabado el colegio, y no regresaba a Madrid hasta septiembre, que volvía asilvestrado, después de haber veraneado entre gallinas, caballos, ortigas, moras, bañándose en el río (o el ríu, como volvía él diciendo) y pareciéndole de lo más normal que sus amigos tardaran en salir a jugar porque tenían que quedarse ayudando a recoger el cuchu (la caca de la vaca, para que nos entendamos).
Si Mr. Argu habla de Asturias se le ilumina la cara y mil recuerdos se agolpan en su cabeza: sus abuelitos, la mantequilla casera de la abuela, la media compuesta del abuelo (que aquel niño ignoraba que lo que su abuelo se estaba metiendo para el cuerpo era todo un pelotazo), los juegos con los primos, el perro que se comía todas las sobras (excepto aquel puding de bonito que debía ser incomible), la primera borrachera...
Parece lógico que quiera que Asturias siga formando parte de su vida, sobre todo en un día tan importante, no?

miércoles, 22 de febrero de 2012

Sobre la lista de bodas

Supongo que elegir una u otra opción dependerá de si son los novios los que pagan la celebración o si son los padres los que se hacen cargo. También dependerá de si los novios tienen ya casa, o si tienen que amueblar o les faltan cosas.
En nuestro caso está claro, nuestros padres nunca han tenido unas economías especialmente bollantes, así que la boda corre por nuestra cuenta y llevamos viviendo juntos casi 3 años.
De todas formas, hemos hecho una lista de bodas, para aquellos que aun se resisten a regalar directamente dinero; aunque para los que no lo sepáis, os lo cuento: da prácticamente lo mismo hacer una transferencia que regalar algo de la lista de bodas. Esto es porque las páginas web en las que te puedes hacer la lista, te dan la opción de ingresarte el dinero correspondiente a los regalos, o bien que te quedes con aquellos que tú decidas.
Nuestra lista está llena de cosas que adoraría poder quedarme, pero me parece que no va a poder ser. Pero lo que sí hemos ido incluyendo han sido regalos relativos a la Luna de Miel, como los vuelos, el hotel, excursiones, los traslados...
Y como podemos añadir regalos de nuestra propia cosecha, pues de vez en cuando me voy acordando de algo y lo añado, como el otro día, que incluí una cámara de fotos acuática, para hacer fotos en la playa de Punta Cana. Que todavía me acuerdo del chasco que fue tener una supercámara en Riviera Maya comprada en el Decathlon y que nos debió costar la friolera de 20 euros (iba con carrete) y descubrir que se llenaba de agua y se hundía como una piedra sin poder inmortalizar los miles de peces payaso y las mantas-raya, como las llamaban allí, que yo sigo preguntándome si es lo mismo una manta y una raya, hasta el momento yo pensaba que eran algo distinto...

Primeras impresiones sobre nuestra invitación

Como ya os he comentado, nuestras invitaciones están por así decirlo "en el horno". Pero hemos enseñado un boceto, un pequeño adelanto a los padres de Mr. Argu (o sea, a Mr. Argu original y mami querida) y a mi hermana mayor.
Las reacciones han sido distintas.
Os llevo tiempo diciendo que nuestras invitaciones no tienen nada que ver con lo que yo he visto de invitaciones, al menos no en persona, pero sí en blogs y os aseguro que navegando por internet se encuentra mucho talento.
Y precisamente por la originalidad de las invitaciones, la reacción de mis suegros fue un poco... no quisiera decir fría, porque no fue así, pero si podría decir que se quedaron algo descolocados, y preguntaron a quién se le había ocurrido algo tan original.
Por otro lado, mi hermana dijo algo que me encantó:
Esta invitación transmite lo que de verdad tiene que significar una boda
Y esa es la idea, y con ese cariño estamos preparando todo, y pensando hasta el último detalle.
Supongo que es normal que a los padres les sorprenda algo tan innovador, pero creo que en el fondo valoran que nos los estemos currando tanto.

martes, 21 de febrero de 2012

El look de boda de Mr. Argu

Unas cuantas bodas atrás asistimos a una en la que tanto el novio como el padrino y los testigos iban de chaqué. La mar de guapos todos.
Mr. Argu no se vistió de chaqué en aquella ocasión, y se quedó con ganas de saber cómo le quedaría.
Así que, qué mejor ocasión que su propia boda. Así que allí que se fue, acompañado de hermanita del alma y mami querida a buscar trajes que fueran con su estilo. Yo no fui, porque, aunque luego él me cuente cómo es el traje, me apetece que me sorprenda verle así, tan elegante. Él lo pensó, y también quiere sorprenderme.
Probó algunas opciones, y está claro que todavía tiene que volver otro día, pero le atendieron muy bien, y quiere volver con más tiempo. También a mami querida le pareció que iba requeteguapo, así que es probable que esa sea su decisión final (supongo que a hermanita del alma también le gustó, pero no he hablado con ella todavía).
Luego siempre hay detalles que marcan la diferencia, como color del chaleco, color de la corbata... Me mola cómo queda en las fotos cuando el novio va a juego con la novia en algún detalle, como que las flores del ojal y las del ramo sean las mismas, o que el color de la corbata y los colores del ramo sean similares...
Pero como ya habré dicho en otras ocasiones, el casi lema de Mr. Argu es "todavía queda mucho tiempo", así que... a esperar!

miércoles, 15 de febrero de 2012

Yo y mi suerte en los sorteos. Parte II

A los pocos días de ir a recoger la alianza que me había tocado en Todoboda, estaba en la cama twiteando tan feliz cuando vi que... había resultado ganadora de otro sorteo!!!
Aunque el obsequio no tiene nada que ver con nuestra boda, lo gané gracias al blog de Boda con Encanto. Un precioso bolsito me MissSixty que ya me han mandado a casa y todo.
Es más bien un bolsito de fiesta, y que me hubiera venido de miedo para toda la pila de bodas a las que asistí en los últimos 2 años, pero bueno... siempre se puede salir a cenar a un sitio superguay a lucirlo, o si no... se me está ocurriendo que... me podéis invitar a otra boda!
Pero esto casi lo dejamos para el año que viene, que este lo tengo muy mal...
A ver qué pasa con esa boda primaveral en Chicago!!! Qué ilusión, una boda a la americana, de esas que aparecen en los blogs que tanto sigo, con damas de honor vestidas del mismo color, pajes, coche con latas colgando y haciendo ruido, cartel de Just Married...

Opiniones encontradas sobre el champú de caballo

Parece que no soy la única que se interesó por el tema del champú de caballo. Por lo visto es carne de blog, muchas bloggeras de referencia han hablado de ello, unas recomendándolo, otras desacosejándolo.
Y esta polémica ha llegado a la tele. Ya lo he visto en 2 informativos diferentes:
- En Antena 3, más o menos lo demonizaban y sacaban a la supuesta presidenta de la asociación de dermatólogos (que a mí sólo por ir pintada como una puerta ya me genera mis dudas), diciendo que la biotina, la supuesta sustancia crecepelo, sólo hacía efecto de manera ingerida, no cutánea, por lo que no sólo no hacía crecer más el pelo, sino que podía generar cambios y afectar al ph del cuero cabelludo.
- En Telecinco se centraron más en las opiniones de las personas que lo habían probado. Todas las que salieron coincidían en que ahora tenían el pelo muy brillante, y sólo algunas decían que además les había crecido un montón. Sacaban también vídeos de youtube con supuestas expertas en belleza con pinta de chonis (con todo mi respeto a las chonis, claro ;-) diciendo: "mira, a mí me ha crecido todo esto", y se cogían medio metro de pelo.
La cuestión es que yo no noto que me haya crecido más. Tampoco lo noto más brillante. Pero noto que me he gastado 8,5 € en un pedazo de bote de champú y que como deje de utilizarlo, Mr Argu me mata, que él no es muy amigo de tirar las cosas así porque sí.
El verdadero cambio en mi pelo lo noté cuando empecé a usar un champú en pastilla de una tienda que se llama Lush. Es una tienda de productos naturales que huele que alimenta (desde varias manzanas de distancia, e incluso con la tienda cerrada), y que me recomendaron cuando comenté mi tipo de pelo. El que estoy usando de vez en cuando se llama Kharma, y se supone que equilibra el cuero cabelludo. Esta pastilla deja el pelo súper brillante, y dura para muchísimos lavados.
Ni qué decir tiene que cuando me la compré por supuesto no fue lo único que me llevé... y es que a mí se me vende muy fácil. Menos mal que hemos puesto el ModoAhorroON.

Ponerse en forma para el gran día... o para la luna de miel. Parte II

Os preguntaréis qué ha pasado con las mancuernas que me compré. Sí, aquellas de color rosa tan monas (cualquier día cuelgo una foto). Pues lo cierto es que no les he quitado ni la etiqueta.
Eso sí, ayer volví a mi adorada Tiger, y, optimista de mí, me compré una funda para el iPhone para correr, una de esas que van atadas al brazo. Mi amiga V me miró incrédula y mi dijo: "Pero tú corres?"
Podéis imaginar mi respuesta: "No. Salí una vez, pero cualquier día de estos empiezo de nuevo". El caso es que soy una kamikaze, porque le he pedido a Mr. Argu que me haga una tabla de ejercicios para hacer con las mancuernas (ya que no tengo ni idea de los ejercicios que tengo que hacer para tonificar brazos y esas cosas que quería hacer para lucir el vestidito). Ayyy, qué miedo me da! Está el tío emocionado, me ha hecho una tabla para toda la semana, con 5 días de ejercicios (porque sabe que no los cumpliré ni de coña y lo mismo tirando por lo alto cumplo 3...). Ya veremos, vosotros animadme, que falta me hace. Me niego a salir en todas las fotos de la luna de miel con un puñetero pareo para disimular lorza.

lunes, 13 de febrero de 2012

Seguimos con la cuenta atrás

Hoy es 14 de Febrero. Sí, San Valentín, pero para mi es importante por otro motivo: faltan 5 meses. Y los nervios aumentan.
Por motivos operativos, no voy a cambiar el nombre del blog, así siempre sabréis cuándo empecé a escribir.
Este fin de semana descubrí que he perdido 2 kilos. No tengo ni la menor idea de dónde han salido esos 2 kilos, porque yo me veo igual, pero quizá es verdad eso de que se adelgaza. No sé, de momento no me lo creo mucho, porque sigo comiendo como una bestia al mediodía, y mi jefa flipa con mis excesos de chocolate y patatas fritas.
Creo que cuando realmente empezarán los nervios será a mediados de abril, que iremos por Asturias para ir cerrando temas, hacer la prueba de menú, de peinado, etc.

jueves, 9 de febrero de 2012

Invitados con niños

He ido a bodas a las que no asistía ni un solo niño. La mía no creo que sea una de esas, más que nada porque contando con nuestros sobrinos, y con los hijos de varios primos... preveo una mesa de niños de lo más poblada.
No me gusta que los niños vayan vestidos de pequeños repollitos a una boda. Ellos también tienen derecho a pasárselo bien, son niños al fin y al cabo y un modelito de esos cuesta lo suyo, no van a estar pendientes de si se lo manchan o lo estropean.
Así que una de las primeras decisiones que tomamos, y que además creo que Mr. Argu y yo lo hablamos incluso antes de comprometernos, fue que a nuestra boda los niños irían disfrazados. Queremos que sea una fiesta también para ellos, que lo disfruten, que se revuelquen por el césped si hace falta, y además seguro que salen unas fotos de lo más chulas. Confieso que se me cae la baba viendo a los peques disfrazados.

Qué bonita que es mi alianza!

Ayer fui a recoger la alianza que me tocó en el sorteo de Todoboda. Tuvimos que ir a una joyería (J.E. & C. Carrera), en un centro comercial en La Moraleja. Para variar, de camino tomamos varias salidas equivocadas en la carretera, y es que Mr. Argu y yo tenemos un peligro con el coche... Antes llevábamos GPS, pero se ha fastidiado el mechero del coche y no podemos cargarlo, así que... Pero vamos, que incluso con GPS nos perdíamos y todo. Lo nuestro no tiene remedio.
En fin, que aun así nos dio tiempo a reírnos mucho. Bromeábamos porque hacía un frío de mil demonios pero por allí la gente parecía que no le afectaba. Pensamos que deben tener tanto dinero que ya pierdes hasta la sensibilidad en la piel y todo te resbala.
En fin, que mi alianza es preciosísima, la verdad. Cuando vi la foto en Internet, pensé que quizá era excesiva para mí, pero no, es preciosa, juvenil y... enorme para mis deditos.
Allí se quedaron alucinadas, llegaron a decir "Son los dedos más pequeños que he visto en todos los días de mi vida". El caso es que tuvieron que encargar una nueva, y en un mes o así la tendré para mí solita.
Y sí, gané el sorteo, sin condiciones, sin letra pequeña.
Vino incluso un fotógrafo (que menos mal que me pilló con el día guapo, y a Mr. Argu con su camisa de ingeniero formal), que nos hizo algunas fotos y pasó apuros para sacar favorecida la alianza enorme en mis dedos huesudos. Y salimos en la web de Todoboda. Hay unas declaraciones mías diciendo que nunca me había tocado nada... Claro está que yo no dije eso, debieron entenderme mal.
Os animo a participar en todos los sorteos, que algunos sí que tocan!!! Ayer mismo me enteré de que en otro sorteo me ha tocado un bolso de Miss Sixty. Estoy en racha! Tiembla, Euromillones!

lunes, 6 de febrero de 2012

Los nombres de las mesas

Este es otro detalle por el que los novios se van preocupando cada vez más. Os contaré ejemplos de las ultimas bodas a las que he ido, o que merezca la pena comentar:
- Boda campestre en Asturias. Aquí había una sola mesa larga en U para todos, los únicos que tenían sus asientos más o menos asignados eran los novios y los familiares más cercanos. El resto utilizamos el antiguo método de maricón el último. Fue divertidísimo. Ahí todos sabíamos que dependiendo de quién tuvieras al lado, así te lo pasarías durante la comida. Tuve mucha suerte. - Boda en hotel en Madrid. Las mesas tenían nombres de calles. La nuestra era Wabansia Av. Que es el avenida donde vive nuestro amigo Pepe, en Chicago, y que estaba sentado en nuestra mesa. No sólo eran nombres de calles, sino que tenían también cierto significado especial en función de los ocupantes de la mesa. También recuerdo 13 Rue del Percebe y Avenida de los Toreros. - Boda en Salamanca y boda en finca en Madrid. Las mesas tenían nombre de sitios que habían sido visitados por los novios y que tenían especial significado para ellos. - Boda medieval y de fantasía. Los novios repartieron unos puntos de libro (de los que colocas en la página en la que te quedas del libro, para no perderte), con unas palabras en élfico. Luego había un panel con los nombres de las mesas y su traducción. A nosotros nos tocó en la mesa de los novios y se llamaba Amor Eterno. - Boda en Pamplona. Como la vida de la novia giraba especialmente alrededor del mundo del cine, las mesas tenían nombre de películas, que tenían cierta relación con los invitados que estaban sentados en cada mesa, y a la entrada del salón colocaron un cartel que simulaba la cartelera de un cine, donde se indicaban los números de las salas, y la peli que ponían en ellas. Nosotros estábamos en la mesa Días de Fútbol. De todas las ideas, la más original creo que fue esta última. Y en cuanto a cómo se llamaran nuestras mesas, pues no lo voy a desvelar, pero lo que sí puedo adelantar es que cuando los invitados tengan la invitación, tendrán una pequeña pista de por dónde irán los tiros...

Estrenando hasta el más mínimo detalle, parte II

Cuando hablé de la ropa interior que llevaría el día B, hubo quien me pidió mas detalles (la misma que propuso el tema, claro), y hubo quien hizo cierta crítica por desvelar hasta ese detalle.
Personalmente creo que se puede hablar de cualquier tema si lo tratas con naturalidad. Porque digo yo que todas llevamos bragas, no? Bueno, menos la novia de Hugo Silva, al parecer... Y dicho esto... de veras es necesario que lleve medias a mi boda aunque sea en pleno mes de julio? Entiendo que normalmente las novias lleven como su algo azul la liga, y llevar una liga si no llevas medias, no tiene mucho sentido, pero... no sé. Una de las muchas cosas que me gustan del verano es no tener que llevar medias, y además ese día ni se me van a ver las piernas! En fin, que es probable que ni liga, ni liguero, ni medias, claro. Y como algo azul, pues se puede conseguir un lazo de ese color, lo atas en el tanguita y tan contenta y tan tradicional.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Una boda medieval y de fantasía

El escenario no podía ser más apropiado, unos jardines, en plena sierra madrileña, al anochecer.
Original, desde luego. Y divertida también, porque no a todas las bodas van todos los asistentes disfrazados de damas medievales, príncipes, guerreros, duendes, elfos, hadas...
Y los novios genialmente caracterizados. Ella con un vestido hecho expresamente para la ocasión, y él con un traje alquilado y que fue usado en la película Tirante El Blanco, que pasó un poco sin pena ni gloria, pero que para los que no hayáis oído hablar de ella, pues cuando no estaban desnudos haciendo cochinadas (como en el 90% de las pelis españolas), llevaban un vestuario increíble. Los novios nos sorprendieron poniéndonos en la mismísima mesa presidencial, y disfrutamos de una cena muuuuy buena, con uno de los mejores solomillos que he probado (se notaba que era de vaquita de esas explotaciones ganaderas que tanto ha recorrido Mr. Argu). En esta ocasión no hubo primer baile de los novios, pero a mitad de la noche se marcaron uno de lo más divertido al ritmo de You can leave your hat on (Nueve semanas y media). Y la pena fue que esa noche yo me encontraba con una de mis muy frecuentes amigdalitis, así que no pude disfrutar demasiado de la fiesta. Eso sí, Mr. Argu, como tantas otras veces, fue de los últimos en irse a dormir.

La primera boda que recuerdo

Mis recuerdos son borrosos, ya que tendría unos 12 o 13 años como mucho. Pero vereis que lo que recuerdo dice mucho de cómo fue aquella boda:
- Una tarta bajando del techo
- Final de fiesta bailando Saturday Night todos sobre un escenario (aquella canción que incluía coreografía)
Y... recuerdo poco más. Eran otros tiempos y todo evoluciona. Menos mal!!! En las últimas bodas a las que yo he ido no había ni tarta, era sencillamente un postre. Recuerdo también una instrucción que me dio mi madre: si no hay ropero, cuelga tu abrigo en la silla dado la vuelta. De esa manera, si los camareros te lo manchan, se manchará en el forro, y no será tan grave. Un buen consejo, no? ;-)

La última boda a la que fui

Nos pusieron el listón muuuy alto. Todos lo comentaron. Iré por partes:
- La ceremonia, increíblemente emotiva, y en un salón precioso, muy romántico. La elección de la música: perfecta; y las palabras de sus seres queridos hubieran puesto en apuros al mismísimo Chuck Norris. Ya me lo imagino ahí con la lagrimita.
- El cóctel y banquete. Comida increíblemente buena, personal atento, cantidades brutales y calidades casi mejores. Y qué decir de la compañía, mi mesa y la mesa vecina fueron divertidísimas, todo el mundo iba con mogollón de ganas de disfrutar, y algunos incluso sin haber dormido la noche anterior. - El baile de los novios. Una elección muy personal, una canción muy suya, aunque el baile se me hizo breve, pero lo bueno si breve... - La barra libre. Increíble. Una calidad inmejorable. Los camareros se esmeraban en cada copa. - La música. Variada, bailable, divertida. Y por último, la guinda la puso el atrezzo que nos dieron para hacernos las fotos más divertidas: sombreros de pirata, pelucas, flores, coronas, gafas... Impagable volver a casa felices Mr. Argu y yo cantando "La vida pirata es la vida mejor". De esos recuerdos que no se borran.

Mi última noche de soltera

Mr Argu decía que vaya tontería eso de pasar separados nuestra última noche de solteros. Pero para mí no es ninguna tontería. Y menos tal y como lo tengo pensado.
La idea es dormir en una misma habitación mis dos mejores amigas y yo. Sé que ellas me apoyarán y me tranquilizarán cuando no pueda dormir, que nos reiremos recordando los modelitos vistos en anteriores bodas y pensaremos en quién será la más elegante al día siguiente.
Y confío en que el día B, me cogerán de la mano y sabrán desatar el nudo de mi garganta. Aunque en realidad eso es mucho pedir, así que me vale sólo con saber que estarán conmigo.